No sé cómo ha sido
pero tú me has dado
la alegría de vivir
me has cambiado
todo mi ser.
No sabía lo que era
el amor
hasta que te conocí
recibir y dar
querer y que te
quieran.
Cada día pienso en ti
como sería nuestro
amor
si los dos
estuviésemos en la misma ciudad.
Pero este amor lejano
hace que la llama
del deseo y del
querer
sobreviva a la locura
de amarte y conocerte todavía más.
(Getima)